Todo este espacio lleno de un baúl de los mejores recuerdos de los años de infancia se lo dedicamos a nuestros hermanos, Marielo, Erasmo y Emmanuel quienes han sido nuestros amigos, consejeros, guarda espaldas, chaperones, nuestra fuente de inspiración, compañeros de juego, de travesuras, historias, anécdotas, risas, lágrimas, inventos, y si seguimos con la lista nos llevamos todo este espacio. Los queremos y admiramos muchísimo y estamos orgullosos de toda la luz que irradian en cada paso que dan en sus vidas.
Gracias por sus ideas, y por ser Compi, Memelovsky y Piquito.
Con mucho cariño, Chapopan y La Pato.
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